La quitameriendas tiñe de morado el otoño

Esta flor, con uno de los nombres comunes más curiosos, embellece las praderas en otoño y genera un compuesto aprovechado en la medicina 

Especiario
Por Hugo Díez, geógrafo, ambientólogo y divulgador ambiental
Con la llegada del otoño, en las zonas montañosas de la península ibérica podemos encontrar unas flores moradas que reciben numerosos nombres comunes como sembraderas o cólquicos, pero el más empleado y el que más llama la atención es el de quitameriendas (Colchicum autumnale).

Este nombre viene dado por la floración de esta planta de la familia Colchicaceaea lo largo de septiembre, cuando se va terminando el verano y se acortan las tardes. Esto siempre ha producido que se cenara antes y por eso, los jornaleros han asociado tradicionalmente la aparición del Colchicum con la retirada de la merienda.

«La quitameriendas recibe numerosos nombres comunes como sembraderas o cólquicos»

Descripción
Es una hierba perenne que se puede encontrar de manera solitaria o en grupos de hasta 13 individuos por bulbo. Aparece a nivel del suelo y en su estado de floración puede llegar a alcanzar los 20 cm de altura. Aunque el color de las flores se pueda confundir con el del azafrán por ser lila, rosado purpúreo o blanquecino, el número de estambres de esta flor es de 6 mientras que el azafrán tiene solamente 3 (Rico, 2013). Debido a esto, otros nombres vernáculos que recibe el Colchicum son Azafrán silvestre o Falso azafrán.

Hábitat
La quitameriendas es una de las ochenta especies que componen el género Colchicum y se encuentran distribuidas desde el noroeste de África hasta el centro de Asia. Según Rico (2013) la región Mediterránea y Europa central son las zonas que tienen una mayor diversidad de especies de este género. En la Comunidad de Madrid la encontramos en el Sistema Central, ya que su hábitat es de praderas húmedas con una altitud entre los 450 y 2.000 metros. Coincide normalmente con claros de bosque o pastizales de montaña que tengan un suelo profundo y húmedo (Renobales y Sallés, 2001).

Propiedades y usos
El Colchicum autumnale se considera una planta venenosa porque contiene en sus semillas un alcaloide tóxico denominado colchicina. Ya en la Grecia romana, el médico Dioscórides menciona en un manuscrito sobre remedios medicinales la toxicidad de esta planta (López Eire, 2006). Aún así, este compuesto en bajas cantidades tiene propiedades antiinflamatorias que se han aprovechado en la medicina tradicional para tratar la artritis y la gota.

«En la Comunidad de Madrid la encontramos en el Sistema Central en praderas húmedas»

Actualmente, en la medicina moderna también se emplea este compuesto antimitótico para tratar enfermedades como la esclerodermia, cirrosis biliar primaria o la fiebre mediterránea familiar, por lo que existe una industria de cultivo del Colchicum para extraer la colchicina.