Los desechos que se generan cuando se practica en el medio esta actividad (y que no son retirados), pueden llegar a causar graves problemas a las aves acuáticas
Opinión de El Guadarramista
Por Jonathan Gil Muñoz (Director)
La semana pasada, el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat, ONG madrileña más conocida como GREFA cuya sede se encuentra en el Monte del Pilar (Majadahonda), informaba en su web y en las redes sociales cómo en su Hospital de Fauna Salvaje se había atendido a dos aves afectadas por residuos de pesca.
Una de esas aves fue un cormorán grande rescatado tras quedarse enganchado con un sedal en un estanque en Alcorcón. Gracias a la intervención de los Bomberos y a una voluntaria de la ONG madrileña, el ave pudo ser liberada, al igual que ocurrió con una garcilla bueyera encontrada en Leganés y que se hallaba atada por un sedal a la rama de un árbol de un parque público. Dos casos que en definitiva lo que hacen es poner de manifiesto lo peligrosos que son estos residuos de pesca, especialmente para las aves acuáticas.
“Una de las aves rescatadas fue un cormorán grande tras quedarse enganchado con un sedal”
En este sentido, desde GREFA se nos advierte que en sus instalaciones han atendido a lo largo de los años a otras muchas aves acuáticas con anzuelos enganchados a su cuerpo, incluso a pollos de aves que han quedado enredados en sedales abandonados tras llevarlos sus progenitores a los nidos. ¿Es evitable? Por supuesto que lo es, faltaría más, sólo hay que poner un poco de cuidado, aunque está claro que, como en cualquier otra actividad recreativa, hay gente que se lo toma en serio y otra que no.
“¿Es evitable? Por supuesto que lo es, faltaría más, sólo hay que poner un poco de cuidado”
Si bien es cierto que no es una problemática medioambiental de primer orden, es la suma de peligros lo que nos debe alertar. Son ya muchas las amenazas a las que se deben enfrentar a cada momento nuestra fauna silvestre como para que le añadamos más. La intervención de los cuerpos de seguridad y por supuesto los Agentes Forestales es vital para, por medio de sanciones, se evite que los desaprensivos dejen en los entornos acuáticos estos residuos de pesca. Incluso la ciudadanía también puede y debe participar en ese cuidado del medio ambiente.
De todos modos, yo me pregunto, ¿esos aficionados a la pesca que dejan sus desechos de pesca en los lugares en los que realizan su actividad no se dan cuenta de que si todos hicieran lo mismo no se podría pescar allí por haberse convertido en un vertedero? Son cosas que no se pueden entender de ninguna forma, pero que suceden, a las pruebas me remito, pero ojo, que lo mismo sucede con otras muchas actividades de ocio que se desarrollan en el medio natural.
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