Sube la marea… azul

El resultado de las Elecciones Generales arroja una España coloreada por el PP. ¿Cómo afectará su mayoría al medio ambiente? ¿Y a Guadarrama?

`Opinión de EL GUADARRAMISTA´
Por Pablo Esteban (Subdirector)

El Partido Popular ha conseguido un resultado histórico en las pasadas Elecciones Generales acumulando un poder nunca visto antes en las instituciones nacionales, autonómicas y municipales. Más allá de estrategias erráticas electorales de unos y de silencios tendenciosos de otros, el pueblo ha hablado. Este diario digital, desde su perspectiva medioambiental, se pregunta cómo gestionará la marea azul el patrimonio verde.

Esta tribuna no puede obviar la evidente injusticia que la actual Ley Electoral perpetra sobre partidos que, como IU, EQUO o UPyD, entre otros, habrían multiplicado su representación con una legislación electoral proporcional. Desde EL GUADARRAMISTA demandamos la derogación de la Ley D’Hondt que, si bien tuvo su justificación tras La Transición para integrar los nacionalismos periféricos en el Parlamento nacional en un momento de recelos, hoy ya no tiene ningún sentido y viola flagrantemente el principio constitucional de Igualdad.

Carencia de contenido

Sea como fuere, el precedente de la campaña electoral no augura nada positivo para los intereses verdes. La ecología ha brillado por su ausencia en los dos principales partidos nacionales. El programa popular dedica un apartado al medio ambiente, integrado por procesos de intenciones y enunciados banales y carentes de contenido. La definición de una política medioambiental de “carácter nacional”, el avance hacia “una economía más sostenible, sólida y eco-eficiente”, o el impulso de la participación de los españoles “en la protección y mejora del Medio Ambiente” son solo algunos de sus propósitos inconcretos.

Llevamos muchos años escuchando las mismas vaguedades que nunca cristalizan en hechos. El panorama medioambiental en España requiere mucho más que de meras pretensiones, necesita actuaciones concretas e inversiones precisas, no solo en materia de conservación, sino también de promoción y concienciación. Estas mismas medidas son aplicables al ámbito del Patrimonio Histórico Nacional, que contempla indefenso como año a año pierde peso específico en la agenda de prioridades gubernamentales.

“Apoyaremos la caza como actividad compatible con la conservación del medio ambiente y el desarrollo rural”, reza el programa de la formación popular. No faltan guiños a los cazadores, una imagen que nos recuerda tiempos de una época oscura. Asimismo, el PP también declara que impulsará “las medidas oportunas para incrementar la seguridad y preservar nuestras especies de fauna, con especial atención a aquellas que se encuentran en peligro”. Aprisa Rajoy. Falta hace, sin duda.

Objetivos en la Sierra

Y en la Sierra de Guadarrama, ¿qué? No parece que vaya a haber cambios significativos en el proyecto de Parque Nacional. Sin embargo, una de las grandes amenazas de la región, el desarrollo inmobiliario especulador, cristalizado en grandes edificios de viviendas o complejos comerciales, debe ser atajado de raíz y perseguido legislativa y judicialmente. La proliferación de campos de golf en áreas protegidas es otra de las lacras que ensucian el paisaje serrano y cuya regulación debe ser vigilada muy de cerca por los nuevos gobernantes. Difícil cuestión esta, teniendo en cuenta el origen de la promoción de muchos campos golfísticos en España.

Los populares dominan la gran mayoría de los Ayuntamientos de la comarca, Esperanza Aguirre gobierna con mano dura desde la Puerta del Sol y ahora Rajoy tendrá carta blanca para dar rienda suelta a su legítima mayoría absoluta. Esta uniformidad no debe ser juzgada a priori con suspicacias. Lo peligroso no es la mayoría absoluta, sino su gestión. No obstante, de todos es sabido que el centro-derecha no se caracteriza por una especial inquietud en cuestiones medioambientales, tal y como ha quedado plasmado, una vez más, en los ejecutivos municipales y autonómicos que dominan en Madrid.

Hay por delante mucho que hacer. Es indiferente el color de quien lo haga, siempre y cuando lo haga eficazmente. El Partido Popular cuenta con el respaldo de una amplia mayoría de los españoles, lo que no significa una patente de corso sobre la mesa. Respeto, crítica y esperanza. Exigimos que esta legislatura sea en la que el medio ambiente deja de ser un cero a la izquierda en la estrategia política y se convierta en una ocupación prioritaria en las decisiones públicas. Nos va la vida en ello, literalmente. Solo un deseo: que la marea ni nos destiña, ni nos ahogue, simplemente nos aúpe.

Pablo Esteban Mata
(Subdirector)
p.e.elguadarramista@gmail.com

El Guadarramista

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