Ni ‘mal tiempo’, ni ‘Sierra de Madrid’

Son dos expresiones que deberíamos desterrar de una vez por todas de nuestro vocabulario

Opinión de El Guadarramista
Por Jonathan Gil Muñoz (Director)
Aunque a muchos eso de ver caer agua o nieve, con la consecuente bajada de temperaturas, no les guste mucho, por no decir nada, las últimas semanas nos han venido que ni pintadas para que los niveles de agua en los embalses de la Comunidad de Madrid cojan aire y se apaguen, aunque sea temporalmente, las alarmas sobre las reservas del líquido elemento en nuestra región. De hecho, hay ahora mismo hasta 8 embalses que superan el 70% de su capacidad, lo que es sin duda una gran noticia, y todavía queda mucha nieve en las montañas.

«Las últimas semanas nos han venido que ni pintadas para que los niveles de los embalses de la Comunidad cojan aire»

Las cosas como son, tenemos que ser conscientes de que el mal tiempo no es de verdad tan malo como lo pintan, y siempre trae cosas buenas, como por ejemplo que, nuestros depósitos de agua potable, se recuperen tras unos meses excepcionalmente secos. Yo creo que deberíamos esforzarnos por cambiar el vocabulario y dejar de decir eso de «vuelve el mal tiempo» para referirnos a días de lluvia, por ejemplo. Es verdad que el exceso puede originar riadas, inundaciones o el desbordamiento de ríos, por lo que siempre en su justa medida la lluvia debe ser bienvenida por todos y en cualquier circunstancia, por mucho que nos estropee los planes, por mucho que nos moleste mojarnos cuando salimos a la calle o cogemos el coche… Es un auténtico tesoro lo que cae del cielo, basta con preguntar a la gente del campo.

Y hablando de expresiones que debemos desterrar de una vez por todas, una vez más, las nevadas caídas en la Sierra de Guadarrama a lo largo de las últimas semanas, han propiciado que este sistema montañoso tan familiar para todos y que comparte la Comunidad de Madrid con la provincia de Segovia, sea llamada en muchos medios de comunicación como ‘Sierra de Madrid’, apropiándonos los madrileños de lo que no nos pertenece. Se trata de una ya vieja reivindicación que enarbolamos todos los que nos consideramos amantes de aquellas montañas, a veces demasiado madrileñas por su cercanía a la gran urbe. Pero nada de esto es razón para que se le llame como no se debe con un topónimo que no existe. No, hagamos el esfuerzo y llamemos a cada cosa por su nombre: es la Sierra de Guadarrama.

«Las nevadas caídas en la Sierra de Guadarrama han propiciado que sea referido en muchos medios de comunicación como ‘Sierra de Madrid'»

Así que, cuando a partir de ahora cuando llueva en nuestra región, y aunque alguien en la televisión o en la radio nos diga que retorna el mal tiempo, tenemos que responder, sí, responder y a viva voz: «no es mal tiempo, es lo que tiene que hacer en primavera para que tengamos agua hasta el otoño». Y si llegara a nevar en la Sierra, que podría ser en las cotas altas de esta cadena montañosa, que no nos cuelen lo de ‘Sierra de Madrid’, no, es Sierra de Guadarrama. Queda dicho.