El herbicida es el responsable directo de la escasez de invertebrados en los campos, poniendo en riesgo a duferentes especies de aves
Redacción/. La crisis ambiental de la agricultura ha llevado a las avutardas, sisones, aguiluchos, lechuzas y mochuelos, entre otras aves, a una situación desesperada. La escasez de invertebrados en los campos dificulta enormemente que se reproduzcan de manera exitosa. Idéntica situación parece darse en los parques de grandes ciudades, donde los autillos no encuentran sus presas habituales, señalan desde la ONG conservacionistas Brinzal.
El uso de fitosanitarios está detrás de la ausencia de estos pequeños seres. El uso masivo de herbicidas, como el glifosato, acaba con las plantas de las que se alimentan y que solían encontrarse en las lindes de los campos. Desde Brinzal dan voz a una propuesta de recogida de firmas para que la Unión Europea prohiba el uso de este perjudicial químico.