El corzo es un cérvido con una amplia distribución por toda Europa, aunque sus dominios se extienden hasta el norte de China
Especiario
Por Diego Gil Muñoz
En la península Ibérica su presencia es más numerosa en el norte, a lo largo de la cornisa cantábrica. En la Sierra de Guadarrama su presencia es abundante y en plena expansión. Además las densidades poblacionales son estables y acordes al medio que las sustenta, sin ningún tipo de patología que les afecte significativamente.
Descripción
Es el cérvido más pequeño de Europa con un altura en la cruz de unos 75 centímetros y un peso de 20 a 30 kg de peso. Los machos son algo más mayores en tamaño que las hembras y cuentan con cornamenta que crece con la edad. El hocico es negro, los ojos grandes y las orejas prominentes. La cola es muy corta y el pelaje pardo rojizo que se vuelve rojizo con la edad y más claro por el vientre.
Alimentación
Durante el otoño se agrupa y vive en rebaños que se disuelven en verano. Es un herbívoro de actividad nocturna que se alimenta de todo tipo de hojas de arbustos y árboles que pueda alcanzar. También consumen bayas y pequeños frutos así como brotes tiernos.
Hábitat
Es un animal muy adaptativo a todo tipo de hábitats. Coloniza bosques cerrados así como praderas abiertas. Prefieren los bosques mixtos donde se mezclan pinos y árboles de hoja caduca. Puede llegar a colonizar áreas humanas abandonadas así como parques de la periferia urbana. En la sierra del Guadarrama su presencia es abundante tanto en los montes de Valsaín así como en Peñalara.
Reproducción
El periodo de celo va de abril a agosto, en este periodo los machos buscan a las hembras que se encuentran en su territorio. Son tolerantes con los territorios de las hembras que se solapan con el suyo en cambio son muy agresivos con otros machos, todo ello por motivos reproductivos. El nacimiento de las crías se da en el mes de mayo, pariendo una cría las madres primerizas o más de una las madres con más experiencia.
Curiosidades
Durante el embarazo se produce un fenómeno llamado diapausa embrionaria o implantación retardada. Dicho fenómeno consiste en ralentizar hasta casi parar el desarrollo embrionario para acelerarlo durante el mes de enero asegurándose que las crías nazcan en época de abundancia alimenticia.
Las crías de corzo se llaman corcinos y nacen con camuflaje en su pelaje, permanecen tumbados en la hierba mientras las hembras se alimentan lejos para despistar a posibles depredadores. Si llegamos a encontrar a un corcino acurrucado entre la hierba no debemos cogerlo ni tocarlo pues la madre no lo ha abandonado ni está perdido y más tarde volverá a por el.