Un endemismo ibérico que habita en los tramos altos de ríos como el Lozoya, Jarama, Tajuña y el Manzanares, todos ellos afluentes del Tajo
Especiario
Por Diego Gil Muñoz
La lamprehuela es un endemismo ibérico, muy escaso, que está presente en las cuencas del Ebro y del Duero. También la podemos encontrar en los tramos altos de ríos como el Lozoya, Jarama, Tajuña y el Manzanares, todos ellos afluentes del Tajo. En la cabecera del río Sil también existen poblaciones de este pez. Se estima que ha desaparecido en más del 27% del territorio que ocupaba diez años atrás, además sus poblaciones se están fragmentando.

Distribución de la lamprehuela en la península Ibérica.
Descripción
Pequeño pez que no suele superar los 8 cm de longitud, con el cuerpo muy alargado y estrecho. Las aletas y los ojos son muy pequeños, debajo de estos posee una espina que utiliza a modo de defensa. La boca está rodeada de barbillones, en concreto tres pares. No aparece dimorfismo sexual en la especie. El color de su cuerpo es claro con manchas dispersas de color negro.
Pequeño pez que no suele superar los 8 cm de longitud, con el cuerpo muy alargado y estrecho
Alimentación
Su alimentación es muy variada, principalmente se alimenta de pequeños invertebrados acuáticos que captura en el fondo de los ríos. Entre sus presas favoritas podemos citar nematodos, crustáceos, dípteros y efemeróptedos. Además consume detrito y algas unicelulares.
Hábitat
Ha desaparecido de extensas regiones que antes ocupaba sobre todo de los tramos medio y bajo del Ebro y el Duero. Su presencia se ha visto relegada a los tramos altos de los ríos. En estos hábitats encuentra las mejores condiciones para su supervivencia, como son los fondos de grava, aguas prístinas, poco profundas y muy oxigenadas. Con estas características podríamos citar los tramos altos del Lozoya y el Manzanares.

Ejemplar de lamprehuela. Foto: David Pérez.
Reproducción
El desove comienza en marzo aunque se puede prolongar hasta más allá del mes de mayo, dependiendo de la zona y las condiciones ambientales. Para la reproducción elige fondos de grava con fuertes corrientes, donde las hembras excavan un nido con la aleta caudal. Posteriormente la hembra coloca dentro del hueco unos 200 huevos bastante grandes para su tamaño corporal.
Entre las causas de su declive podemos citar la introducción de especies alóctonas como el lucio
Curiosidades
Entre las causas de su declive podemos citar la introducción de especies alóctonas como el lucio, contra el que no pueden combatir por su gran tamaño y velocidad. Parece ser que las hembras preparan varios lotes de huevos de unos 400 cada uno que irán depositando a lo largo del período reproductivo.
Una respuesta a “Lamprehuela, pequeña montañera”