M. San Felipe/. El regreso del lobo ibérico a la vertiente madrileña de la Sierra de Guadarrama incrementó la inseguridad en las explotaciones ganaderas de la zona. Para paliar esta problemática y favorecer la convivencia entre depredadores y ganaderos, la Comunidad de Madrid implantó un sistema de indemnizaciones y ayudas por cada animal muerto por ataque de lobo, así como para implementar medidas de prevención. Para este año 2015, la Consejería de Medio Ambiente prevé aumentar esta partida presupuestaria de 40.000 a 60.000 euros.
Los beneficiarios de estas ayudas deberán ser propietarios de explotaciones de ganadería ovina, bovina, equina o caprina y deberán informar del ataque de lobo, o perro asilvestrado, en un plazo máximo de 48 horas a la Dirección de Medio Ambiente o al Cuerpo de Agentes Forestales de la Comunidad con las pruebas pertinentes.
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