Pequeña viajera

A la Sierra de Guadarrama han comenzado a llegar las golondrinas que anuncian el cambio de estación en los pueblos de nuestra comarca

En estas fechas ya hemos podido ver las primeras golondrinas que regresan de África a nuestros pueblos. El refrán `una golondrina no hace verano´ se adapta a la perfección a los hábitos migratorios de esta especie. Es decir empiezan a volver de una en una y hasta dentro de unos meses no estarán todas aquí, en ese momento estará ya muy cerca el verano.

Descripción

Su plumaje es sobradamente conocido, sus partes superiores son negro azuladas, terminando en la cola escotada. La frente y la garganta tienen un llamativo color castaño rojizo. La hembra se distingue por tener las partes inferiores más blancas, el plumaje no es tan brillante y la cola no es tan larga como en el macho.

Hábitat

Prefiere campo abierto pero no rehuye de zonas densamente pobladas incluso ciudades. Llegan en vuelo hasta los 1.800 m, en busca de presas, aunque no anidan por encima de los 1.500 m. Fabrican los nidos de barro y hierba o paja, lo instalan en cualquier lugar que consideren seguro y estable (cornisas, terrazas, tejados, pajares o incluso en cuevas).

Reproducción

La puesta normal es de cinco huevos, aunque puede llegar a los ocho, consiguiendo la supervivencia de todos los polluelos. La incubación es efectuada casi totalmente por la hembra durante 14 días, la muerte de la hembra ocasionaría el abandono del nido.

Los pollos al nacer están cubiertos por un escaso y muy largo plumón y serán cebados con insectos por ambos adultos. Empieza a volver a los 23-24 días del nacimiento, volviendo a pernoctar en él durante los primeros días después del abandono del nido.

Curiosidades

Al igual que otras de aves las golondrinas europeas se reúnen en la península ibérica para realizar juntas la migración a África. Curiosamente las golondrinas de cada país se separan en el continente negro y se distribuyen en las mismas zonas todos los años. Así por ejemplo las golondrinas británicas se reúnen en Sudáfrica mientras que las españolas lo hacen en Liberia, Ghana y Zaire.

Ave de pequeño tamaño pero con uno de los mejores sistemas de orientación del reino animal, regresa siempre al mismo nido para nidificar, sin falta año tras año.