El movimiento conservacionista encuentra dos caminos diferentes de encarar la problemática derivada de la creación del Parque Nacional (PN)
`Opinión de EL GUADARRAMISTA´ Por Jonathan Gil Muñoz (Director)Los conservacionistas serranos tienen sobre la mesa, a priori, dos opciones, dos estrategias proteccionistas en lo tocante al Parque. Una; continuar la lucha contra el propuesto, ahí está la impugnación ante los tribunales planteada por Ecologistas en Acción. La otra; esperar a tener el PN para iniciar con tiempo y perseverancia su transformación hasta la postura que sostienen los proteccionistas.
La lucha contra el PORN
Por un lado es bien sabido que el PORN no resiste un estudio detenido por los técnicos y expertos ambientales, y eso es bien sabido por una parte importante del movimiento ambiental que ha presentado alegaciones al texto. Todo ello, que no es poco, se suma a la vieja esperanza de ver la Sierra de Guadarrama amparada en Parque Nacional, esta idea, tiene un peso muy grande en las pretensiones de los ecologistas, que trabajan en que ese sueño se cumpla sin defraudar a todos aquellos guadarramistas que hace más de un siglo comenzaron a trabajar en este sentido.
Vemos entonces que la lucha actual contra el PORN se ampara en un gran elenco de alegaciones (no es el momento de desarrollarlas ya que se cuentan por miles) y por el viejo pero pujante espíritu guadarramista; de decir que un Parque Nacional debe proteger la Sierra de Guadarrama, no sus cumbres, una simple limosna proteccionista. Todo ello muy loable desde luego, pero cuidado, se plantea un problema; ha costado años y años llegar hasta este momento, es decir, dos comunidades autónomas han trabajado para llevar un proyecto ante el Ministerio de Medio Ambiente.
Esto se puede resumir en una línea pero implica mucho; mucho tiempo de elaboración y otros tantos trámites burocráticos. Tirar ahora por tierra ese trabajo puede, sin duda, responder a argumentos de peso, pero retrasaría la creación del PN otro plazo indeterminado de tiempo, que puede ser corto o largo…
Dejar pasar para después actuar
Y ahora viene la corriente que ampara el trabajo que se ha realizado hasta ahora. Ojo, no impide su aprobación, pero eso no quiere decir que se esté de acuerdo con él. No traiciona las aspiraciones guadarramistas ya que por un lado se ve por fin el Guadarrama vestido de Parque Nacional y aspira a trasformarlo desde dentro, con algo tangible sobre lo que se pueda trabajar. Pisón es posiblemente quien encabece esta corriente de forma más visible. Aprobado el PN, aunque sea de forma precaria, se obtiene un punto de partida ilusionante para todos aquellos que aman la Sierra.
Hasta aquí todo bien, pero también suscita dudas esta propuesta. Lógicamente las administraciones autonómicas de la Comunidad de Madrid y Castilla y León conocían esta estrategia conservacionista por lo que pueden haberse curado de espanto poniendo ahora o más tarde los medios legales necesarios para que la pretendida trasformación desde dentro no se produzca, esto está claro. Además, pretender el cambio no quiere decir tampoco alcanzar su consecución. El patronato de gobierno del PN sería quien regiría el destino del espacio protegido. Aquí de nuevo las comunidades implicadas podrán tomar posiciones para impedir cualquier estrategia de los conservacionistas.
La otra posibilidad
Estas son algunas de las dudas que se pueden plantear en un primer acercamiento a ambas propuestas. Pueden ser más, y también menos, claro. Ambas son plausibles y lógicas pero quizás se nos olvida algo importante. El Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino puede que no apruebe el texto del PN y plantee una serie de modificaciones, de gran calado, esto seguro, que llevarán al PORN al dique seco por un plazo indefinido…
Jonathan Gil Muñoz(Director) elguadarramista@gmail.com
Una respuesta a “Destino; un Guadarrama Parque Nacional”