Los planes de urbanismo acribillan la Sierra

Obras en un municipio de la Sierra

Ante una insólita espiral legislativa promovida por algunos Ayuntamientos, varios pueblos se preparan para el desembarco de Planes Generales de Urbanismo que no parecen muy transparentes

P. Esteban/. El último hobby al que se están apuntando numerosos ayuntamientos de la Sierra de Guadarrama tiene nombre propio y apellido normativo: Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). El problema es que no todos estos proyectos cuentan con el respaldo mayoritario de la población, y lo que es aún más grave, algunos de ellos parecen ocultar intereses que van más allá del bien público.

Uno de los casos más polémicos se está desarrollando en el municipio de Galapagar, donde se ha presentado recientemente el Avance del PGOU con la frontal oposición de dos grupos municipales: el socialista y Activa Galapagar. Según indican en un comunicado, “el Avance ha sido redactado de espaldas a la oposición, que no ha tenido voz ni voto, e introduce elementos que inducen al error y al engaño manifiesto”.

El documento presentado por el Ayuntamiento “maquilla un plan urbanístico”, y anuncia oficialmente menos superficie edificable, “pero se guarda un as en la manga para cuando vengan tiempos mejores poder urbanizar terreno sin mayores inconvenientes legales”, explican los opositores al PGOU.

Oposición ecologista

Junto al Grupo Socialista y a Activa, los ecologistas de Galapagar, encabezados por el concejal verde e independiente José Luis Barceló, también han anunciado que se “desmarcan” del proyecto del nuevo Avance del PGOU. Así, los grupos ecologistas galapagueños consideran que el documento refleja la “agresividad” con que se trata al Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama y la “ausencia de tratamiento al Parque de la Cuenca Alta del Manzanares”, contraviniendo las sugerencias proporcionadas por la Comunidad de Madrid para abordar “el futuro Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama”.

Concretamente los ecologistas acusan al Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de “esconder el crecimiento urbanístico y el aumento de población en una inexistente reserva de suelo no permitida por la Ley y de prever equipamientos y nuevas infraestructuras en las zonas limítrofes del Parque Regional, abusando de su precaria preservación”.

Sea como fuere, lo cierto es que en los últimos tiempos varios municipios de la Sierra de Guadarrama se han embarcado en nuevos proyectos legislativos de regulación urbanística que están resultando cuanto menos, polémicos. Así, en la localidad de Alpedrete, por ejemplo, se está debatiendo en la actualidad la aprobación de un nuevo PGOU muy discutido por vecinos y asociaciones debido al gran número de errores y deficiencias que contiene -tal y como ha señalado la propia Comunidad de Madrid-.

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