Con la gripe aviar hemos topado…

Vista del lago del Parque Natural El Soto desde la cabecera Este
Un grave caso detectado en la ciudad de Móstoles hace saltar todas las alarmas ante su posible impacto medioambiental y para la salud pública 

Opinión de El Guadarramista
Por Jonathan Gil Muñoz (Director)
La noticia medioambiental de la semana nos lleva irremediablemente a Móstoles. Las alarmas saltaron el pasado martes cuando en el mostoleño Parque Natural de El Soto aparecieron muertas 90 ocas, 5 gansos del Nilo y un ánade real a casa un brote de gripe aviar. Desde entonces, permanece cerrado al público este espacio y desde la Comunidad de Madrid se han adoptado un paquete de medidas urgentes para evitar que esta cepa del virus se propague.

Si bien es cierto que es muy difícil que los seres humanos nos podamos contagiar, la posibilidad existe, aunque es muy remota. Sea como fuere, una vez más nos encontramos ante un virus, que no es desconocido para nuestra sociedad, cuyo origen se encuentra en el mundo animal, justo como sucedió con el coronavirus, además de provenir ambos virus de Asia. Por otra parte, en la actualidad, se considera que el virus causante de la gripe aviar es endémico en las aves de corral en seis países: Bangladesh, China, Egipto, India, Indonesia y Vietnam.

“Sea como fuere, una vez más nos encontramos ante un virus cuyo origen se encuentra en el mundo animal

El caso es que es el ser humano es el responsable primero de la aparición y propagación de este tipo de patógenos. En lo tocante al coronavirus, los expertos señalan al tráfico ilegal de animales salvajes como el punto de partida para su expansión por el mundo, mientras que para la gripe aviar, ya vemos que son las explotaciones avícolas de algunos países las que funcionan como reservorios de este otro virus. Es decir, nuestra relación tóxica con el medio natural y sus habitantes, así como la cría de algunos animales, son las razones que encontramos como telón de fondo.

A la vista de lo anterior también podemos extraer otra importante conclusión: nuestro planeta se ha hecho mucho más pequeño en las últimas décadas, y me explico. Lo que hace unos cuantos años nos podría parecer algo lejano, hoy ya no lo es futo de la globalización. El comercio internacional ha hecho mucho más pequeñas las distancias entre mercados, de hecho, muchos de los productos que compramos a diario han recorrido miles y miles de kilómetros en detrimento del producto de cercanía, que aunque de mayor calidad y mucho más sostenible, es más caro.

“Nuestra relación tóxica con el medio natural y sus habitantes se encuentra como telón de fondo”

Un comercio que también ha traído enfermedades y especies exóticas invasoras de lejanos lugares que se han propagado y medrado en tiempo récord. Ya no existen lugares a salvo de este tipo de problemas medioambientales, es la otra cara de la globalización y ya no hay vuelta atrás porque los mercados internacionales son los que de verdad mandan.

Una respuesta a “Con la gripe aviar hemos topado…

Deja un comentario