Denuncian prácticas inútiles y prohíbidas por parte de la Administración y los agricultores
R. Ávila/. Un grupo de organizaciones ecologistas ha presentado estos días una reclamación que critica la actuación en el control de plagas de topillos que se está llevando a cabo en algunas zonas de Castilla y León, como por ejemplo, en el área segoviana de la Sierra de Guadarrama. Los ecologistas denuncian la ineficacia de estas medidas de control, utilizadas además en otras campañas anteriores, y el elevado e inútil coste que conllevan.
En concreto, las organizaciones Grefa , SEO/BirdLife, Ecologistas en Acción, WWF, la Asociación para la Conservación y Estudio de la Naturaleza de Valladolid (Acenva), la Asociación de Naturalistas Palentinos, la Asociación para la Conservación y Estudio del Lobo Ibérico, Colectivo Azálvaro y la Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica critican la ineficacia de la quema de cunetas, linderas, parcelas y desagües en zonas agrarias, el daño contra la biodiversidad que representa, además del riesgo de erosión y de incendio, y la eliminación de microorganismos beneficiosos para el suelo.
Critican la ineficacia de la quema de cunetas, linderas, parcelas y desagües en zonas agrarias
El gran aumento de las densidades de topillo campesino y de ratón moruno en algunas zonas ha provocado que la Junta de Castilla y León estimule además el reparto de veneno a agricultores, con lo que las acciones de prevención y control, aparte de ineficaces, están totalmente descoordinadas, según han puesto de manifiesto estas organizaciones. Recuerdan también, que la utilización de estas medidas constituye una infracción muy grave, que puede suponer sanciones de hasta tres millones de euros.
Gran despilfarro La crítica no sólo se centra en el peligro y la inutilidad de las medidas. Las organizaciones ecologistas revelan que la prevención de plagas ha generado en otras campañas una inversión de 16 millones de euros. Un despilfarro si se tiene en cuenta el desembolso posterior de otros 9 millones en compensaciones por daños provocados. Es por ello que se solicita una mejor adopción de medidas de control y riesgo estipuladas en la Directiva de Uso Sostenible de Plaguicidas y una gestión integrada de las plagas en la que se tenga en cuenta la diversidad del paisaje, los mecanismos naturales de control y la protección de los cultivos.
Enlace interno: Anapri y La Suerte Ampanera, juntos por la biodiversidad