El vencejo es un ave propia de Eurasia y África, continente en el que inverna, especialmente dotada para el vuelo pese a su pequeño tamaño
Especiario
Por Diego Gil Muñoz
Muy común en toda la península Ibérica y habitante habitual de los pueblos serranos. El vencejo es la adaptación extrema de las aves a la vida en el aire. Se sospechaba hace tiempo y estudios recientes lo han confirmado, el vencejo llega a pasar más de 10 meses en el aire, sin posarse. Sólo durante el período reproductivo se posan en el nido, el resto del tiempo lo pasan en el aire.

Grupo de vencejos en vuelo. Foto: Keta.
Descripción
Con silueta en vuelo en forma de ballesta, con alas largas y muy estrechas. De color casi totalmente marrón oscuro, con una mancha más clara en la garganta. La boca es muy ancha y grande rematada en un pico pequeño. Las patas son muy pequeñas tanto que si cayeran al suelo serían incapaces de volver al aire. La longitud corporal es de unos 17 cm, tiene una envergadura que puede llegar a los 48 cm y un peso de unos 54 gramos.
Alimentación
El vencejo se alimenta de todo tipo de insectos que transporte el aire, siendo todo un especialista en capturarlos en pleno vuelo. Vuela con la boca abierta a modo de ‘cazamariposas’, evita los insectos más grandes o con aguijón. Se han descrito más de 500 presas diferentes, aunque las más destacadas serían las hormigas aladas, chinches, moscas, mosquitos, etc. Alimenta a sus polluelos con bolas de insectos de hasta un gramo de peso que regurgitan al llegar al nido.
Hábitat
Suelen ser independientes del hábitat, excepto en el momento de nidificar. Si en la zona donde residen escasea el alimento no dudará en trasladarse cientos de kilómtros donde poder encontrar insectos. Es una especie estival y migrador de largas distancias, se calcula que puede llegar a cubrir 1.000 km en un solo día. Nidifican en áreas edificadas, en grietas y agujeros, en cajas nido o bajo tejas, siempre en los mismos lugares año tras año.

Ave joven, incapaz todavía de volar.
Reproducción
Se emparejan de por vida con la misma pareja, las parejas se reencuentran al regresar de África al comienzo del período reproductivo. Cada pareja incuba unos dos o tres huevos durante unos 20 días. La cópula puede tener lugar tanto en vuelo como en el nido. Los pollos son alimentados unas 10 veces al día hasta que pueden volar a los 40-45 días de su nacimiento. Alcanza la madurez sexual a los dos años de edad.
Curiosidades
El ‘bolo’ con el que alimentan a los pollos puede estar formado por unas 1.500 moscas pequeñas o unas 200 insectos más grandes. El vencejo es el ave de los récords, está entre las aves más rápidas del mundo, puede llegar a alcanzar los 170 km por hora de velocidad en vuelo lineal.
Sabemos que el vencejo no pasa las noches en tierra, para dormir asciende a una altura de unos 2.000 m de altitud y cae en una especie de letargo mientras planea suavemente. Cuando en pleno período de cría les sorprende el mal tiempo los padres abandonan el nido desplazándose a zonas más cálidas con abundantes insectos. Los polluelos se quedan solos incluso durante una semana sin comer nada, para soportarlo entran en una especie de pequeña hibernación hasta la vuelta de los padres.