M. Boj y M. Carneros/. Seo/Birdlife, con la colaboración de la Fundación Iberdrola, capturaron en la primavera del año 2012 un vencejo para marcarlo y poder así conocer las migraciones de las aves y sus zonas de invernada. Se trata de un pequeño dispositivo de 0,6 gramos de peso mediante el cual se ha desvelado por primera vez los viajes migratorios de los vencejos españoles. El municipio madrileño de Nuevo Baztán ha sido el primero en tener disponible un viaje de ida y vuelta de toda una migración durante un año.
De esta manera se ha podido comprobar que el ave ha viajado desde Madrid hasta Uganda, Tanzania y Kenia, a 6.000 kilómetros de su nido, para pasar el invierno. Y además, se ha visto que los vencejos no paran de volar ni para dormir.