Amanita muscaria, uno de los hongos más conocidos y misteriosos

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Si encuentras una seta rojiza con puntos blancos, comprueba si debajo habita un duende o un pitufo

Especiario
Por Hugo Díez, geógrafo, ambientólogo y divulgador ambiental
Si pensamos en setas o si nos hicieran dibujar una, es muy probable que nos acordemos de la amanita (Amanita muscaria), uno de los hongos más conocidos y, sin embargo, más misteriosos para la sociedad. Recibe distintos nombres comunes como matamoscas, falsa oronja o la seta de distintos seres mitológicos o imaginarios, como duendes, enanos o pitufos.

Es una seta del orden de los agaricales, pertenece a la familia Amanitaceae, donde algunas especies son comestibles y otras muy venenosas. Según el Servicio Navarro de Salud (2022) el 50-70% de las aproximadamente 1.500 especies de setas que existen en España son tóxicas. En el género Amanita hay unas 6 especies mortales, que causan al año entre 200-400 casos de intoxicación. Entre las características que han hecho famosa a este hongo precisamente se encuentra que es considerada una seta venenosa con capacidades psicoactivas. Además, tiene un efecto paralizador sobre algunos insectos. De ahí su epíteto muscaria que proviene del latín y significa mosca, ya que esta seta se ha utilizado tradicionalmente atrapar a las moscas una vez quedaban paralizadas por intoxicación.

La Amanita muscaria es considerada una seta venenosa con capacidades psicoactivas

El píleo al desarrollarse y madurar cambia su forma.

El píleo al desarrollarse y madurar cambia su forma.

Descripción
Lo más característico de la amanita es su píleo o sombrero, que puede medir entre 5-30 cm. Comienza siendo globoso y de un color rojo escarlata en los ejemplare jóvenes, pero según madura se va aplanando y tornando a un color más anaranjado. La cutícula se encuentra salpicada por escamas blanquecinas como restos del velo universal (estructura que envuelve las láminas del hongo). Las laminas son blancas, están apretadas y se encuentran libres. El pie de la amanita es blanco, liso, cilíndrico, de unos 10-20 cm de altura y tiene un anillo membranoso colgante (Centro de Estudios Micológicos T. M. Losa, 2018).

Hábitat
Es una especie con un amplio rango de distribución en zonas templadas y boreales. En la Comunidad de Madrid se puede encontrar en las zonas montañosas del Sistema Central entre los meses del final de verano y durante el otoño. Crece en zonas boscosas de coníferas y de masas mixtas ya que es una especie micorrícica que vive asociada a las raíces de los árboles. Que una especie se considere micorrícica significa que tiene una asociación simbiótica con las raíces de un árbol a través de las micorrizas, donde intercambian nutrientes.

En la Comunidad de Madrid se puede encontrar en las zonas montañosas del Sistema Central

Curiosidades
La Amanita muscaria tiene dos alcaloides psicoactivos que la hacen considerarse venenosa: el muscimol y el ácido iboténico. Estos compuestos neurotóxicos son los que le proporcionan a la seta sus capacidades psicoactivas. Existen numerosas referencias históricas de pueblos de todo el mundo que han utilizado las propiedades esta seta para conseguir un estado modificado de la conciencia en contextos espirituales, religiosos, recreativos o médicos. Se conocen también casos de animales que consumen amanitas para tener experiencias alucinógenas como son los renos o caribúes (National Geographic, 2018).

Dos setas jóvenes (basidiocarpos) de A. muscaria. (Foto: Jesús Ruiz Bueno).

Dos setas jóvenes (basidiocarpos) de A. muscaria. (Foto: Jesús Ruiz Bueno).

Nota de autor
Es importante recordar que la recolección de setas siempre debe hacerse con conocimiento y desde el respeto hacia el medioambiente. El mundo de los hongos es un gran desconocido y cada persona que recoge setas lo hace bajo su propia responsabilidad porque, como se ha podido apreciar en este artículo, existen parecidos con especies no comestibles. Al cortar una seta, emplea una navaja y hazlo en la parte baja del pie, extrayendo así solo el cuerpo reproductor del hongo y sin dañar el micelio. Esporea alrededor de la zona donde hayas encontrado la seta y transpórtala en una cesta de mimbre para permitir que durante el transecto se sigan esparciendo esporas y asegurando así la dispersión del hongo.

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