Rescatando el pasado serrano en la Antigüedad Tardía
el Mirador Por El Equipo A de ArqueologíaEl pasado miércoles 20 de julio se realizó una ‘Jornada de Puertas Abiertas’ en el yacimiento de Navalahija, Colmenar Viejo, que vino a mostrar los últimos hallazgos realizados con motivo de la actual campaña de excavación arqueológica. Al acto asistieron el alcalde colmenareño, Miguel Ángel Santamaría, el concejal de cultura, Jorge García, con una representación oficial de las FAMET, que colabora en la cobertura logística y numerosas personas provenientes de varias localidades serranas, así como especialistas en la investigación y difusión de la arqueología.
Inicio de las excavaciones
La excavación arqueológica en el yacimiento de Navalahija, en la dehesa de Navalvillar, forma parte del proyecto de investigación iniciado en 2008 sobre ‘Poblamiento rural durante la Antigüedad Tardía en la Cuenca Alta del Manzanares’ auspiciado por el Ayuntamiento de Colmenar Viejo y la Dirección General de Patrimonio Cultural, contando con la dirección técnica del Equipo A de Arqueología. Se trata de un enclave minero-metalúrgico fechado en la Antigüedad Tardía (siglo VII-primera mitad del siglo VIII d.C.), que ha sido clave para el conocimiento de estos siglos en el centro de la Península.
Ya desde los inicios de las investigaciones, los resultados arqueológicos evidenciaron que esta aldea se orientó preferentemente hacia la actividad minero metalúrgica del hierro mediante la explotación de vetas de magnetita. De forma paralela, el Equipo A de Arqueología ha realizado prospecciones sistemáticas en otros municipios del entorno, que han permitido plantear un nuevo modelo de ocupación del espacio serrano y que ha cambiado la información histórica que se tenía de este ámbito territorial, con una extensa red aldeana en el pie de sierra madrileño que modificó su paisaje. Se aporta, por tanto, una mayor claridad a esta etapa denominada ‘oscura’, en un momento de profundas transformaciones en los modelos territoriales y en las mentalidades sociales.
“Los resultados arqueológicos evidencian que esta aldea se orientó hacia la actividad minero metalúrgica del hierro”
El Equipo A, las FAMET y voluntarios
El modelo de trabajo desarrollado por el Equipo A, director del proyecto, ha sumado, a lo largo de estos años, a numerosos especialistas e investigadores del ámbito universitario y de otras instituciones científicas, y ha contado con la colaboración del Ministerio de Defensa, a través de las FAMET. Además, ha incorporado la arqueología participativa o de público, que posibilita el acceso al trabajo de campo y de laboratorio no solo a la comunidad local sino a cuantas personas están interesadas en la investigación, difusión y protección de este legado patrimonial.
En esta ocasión han sido más de treinta los voluntarios. Personas que tienen diferentes niveles educativos, entre los 16 y los 70 años. Como colaboración especial, alumnos del Instituto de Psicopediatría Dr. Quintero Lumbreras, de Fuencarral, han participado gracias a la colaboración con la Asociación de Padres y Familiares de minusválidos psíquicos y sensoriales integrados en él. Ha sido todo un honor para el Equipo A y para el proyecto y una experiencia maravillosa para todos.
Resultados de la campaña de excavaciones
Los directores de la excavación, Rosario Gómez y Fernando Colmenarejo, dieron una explicación detallada durante el recorrido por los diferentes sectores del yacimiento, para presenciar la excavación en directo. La visita se complementó con una muestra de los materiales más destacados entre los recuperados durante la campaña. Utensilios como cuchillos, útiles de trabajo de piedra, además de los singulares restos cerámicos decorados, entre otros, fueron enseñados a los asistentes. Otros datos importantes de la campaña en curso son la constatación de una mayor complejidad de las estructuras que son detectadas inicialmente en superficie.
“La excavación ha constatado una mayor complejidad de las estructuras que son detectadas inicialmente en superficie”
Se ha visto cómo se van adosando estancias para complementar y ampliar unos edificios que, aparentemente, parecían más sencillos. Poco a poco se va conociendo mejor la aldea. Aspecto a destacar en la campaña ha sido la aparición de numerosa fauna, restos de los animales con los que convivieron y de los que se alimentaron estas gentes. Los análisis que se realizarán posteriormente aportarán también valiosos datos para reconstruir la vida de estos colmenareños y serranos del pasado.