Vecinos de Galapagar han denunciado al alcalde de la localidad, Daniel Pérez, y al concejal de Urbanismo, Luis Remacha, por unas presuntas edificaciones ilegales en zona protegida
P. Esteban/. No corren buenos tiempos para el Gobierno municipal de Galapagar. A las críticas vertidas por el Grupo Municipal Socialista sobre el estado de abandono del Parque Toril, se ha sumado recientemente la denuncia presentada contra el alcalde de la localidad, Daniel Pérez Muñoz (PP) y el concejal-delegado de Urbanismo, Luis Remacha Elvira, por unos supuestos delitos contra la ordenación del territorio. En concreto, estas irregularidades están relacionadas con unas construcciones presuntamente ilegales levantadas sin la licencia preceptiva en zona protegida dentro del término municipal de Galapagar.
La denuncia, que ha sido interpuesta por varios vecinos del municipio y por un concejal independiente del propio Consistorio, José Luis Barceló (Foro Verde-GyU), señala que las construcciones presuntamente ilegales están situadas junto a una finca de propiedad municipal denominada “Dehesa Vieja”, junto a la Colada de Las Latas y el camino de Navalquejido, que son vías pecuarias y Montes Preservados según la Ley de Montes de 1995.
Viene de lejos
Según los denunciantes, estas edificaciones ya habían sido censuradas con anterioridad por los agentes forestales y por la propia Policía Municipal de Galapagar sin que los responsables del urbanismo de la localidad galapagueña hubieran adoptado medida alguna. “El Ayuntamiento ha estado sobre aviso de esta situación desde hace más de un año sin que haya actuado en ningún momento”, asegura José Luis Barceló. Veremos si con una denuncia de por medio los dirigentes municipales comienzan a actuar.
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