El rescate de las larvas invita a relexionar sobre la pérdida del hábitat idóneo para los anfibios y en general a la actividad antrópica en la Comunidad de Madrid
Redacción/. En plena época de ingresos de crías huérfanas en el Hospital de Fauna Salvaje de GREFA, el pasado 13 de junio tuvieron uno muy peculiar: nada menos que unas quinientas larvas de gallipato llevadas al centro por los Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid.
Los gallipatos habían nacido en una piscina privada de Valdemorillo, que estaba a punto de ser vaciada, lo cual habría impedido a las larvas completar su desarrollo. Por suerte, los Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid han podieron intervenir y rescatar a las larvas a tiempo, trasladándolas a la instalaciones de GREFA.
El equipo veterinario de la ONG analizará la salud de los ejemplares para descartar la presencia de enfermedades emergentes, una de las principales amenazas actuales que se cierne sobre la comunidad de anfibios.