El Cerro de San Pedro

Proponemos al lector en esta ocasión una marcha senderista apta para realizar durante el invierno: la subida al Cerro de San Pedro por su cara norte

Esta montaña esta encuadrada entre las localidades de Colmenar Viejo y de Guadalix de la Sierra, se eleva una altitud de 1.425 m y es fácilmente diferenciable desde muchos lugares del norte de la Comunidad de Madrid, dado que tiene la curiosidad de ser una ‘montaña isla’ al encontrarse aislada sin formar parte de una cadena montañosa; es de mencionar que el destacado geólogo Casiano del Prado y Vallo ya destacó en 1864 la singularidad de esta cumbre.

Vistas desde la cima del Cerro de San Pedro. Foto: José Ángel Macho Barragués.

Paisaje rural madrileño
Durante el inicio del recorrido se podrán divisar grandes extensiones de pastos en los que se cobija ganado, especialmente vacuno, y donde todavía se pueden ver vetustos preciosos muretes de piedra característicos de la Sierra de Guadarrama que separan las diferentes fincas, un Madrid rural a sus puertas, ya que este magnífico paraíso se encuentra a escasos 50 km del centro de la capital. En sus inmediaciones todo es naturaleza: el embalse de Pedrezuela, la dehesa de Navalvillar, el embalse de Santillana y toda la ladera Sur de la Sierra de Guadarrama son algunos ejemplos.

Cima del Cerro de San Pedro. Foto: José Ángel Macho Barragués.

Respecto a la geología de esta montaña el material más predominante es el gneis; el ascenso vertiginoso que lleva a la cumbre esta salpicado de bloques de este tipo de roca metamórfica acompañados de diferentes ejemplares de enebro, principalmente en forma arbustiva; en este paisaje la vegetación es escasa dado que al tratarse de una elevación aislada y quedar muy expuesta, el viento, la insolación y el frío evitan una gran proliferación de la flora.

En verano e invierno esta montaña se torna de un color amarillento característico que la hace brillar de una manera especial dentro del contorno.

Unas vistas únicas de la Sierra
El premio de llegar a la cima no serán las llaves del santo, ya que si el día está despejado habrá otra gran recompensa y se podrá observar una de las mejores panorámicas de todo el cordal de la Sierra de Guadarrama, La Pedriza y la cercana Sierra de La Cabrera. Además, el vértice geodésico se encuentra coronando una almena muy característica, se podrá firmar en un curioso libro de registro depositado para tal fin, así como contemplar un pequeño Belén o nacimiento más típico de las montañas del norte del país.

La ruta
Se trata de un itinerario corto pero intenso ya que tiene cierta dureza debido a que se recorre una distancia corta acumulando un desnivel constante que dejará exhaustos a los atrevidos que lleguen a la cima.

Cerro de San Pedro.

Para comenzar esta ruta (5 km y 2h de duración aprox.) habrá que dirigirse por la carretera M-607 hasta la salida 34; una vez incorporados a la carretera (M-625) dirección Guadalix, se empezará a divisar el coloso del Cerro de San Pedro, al llegar a sus faldas (km 7,5) hay que aparcar junto a una casa abandonada y pasar al otro lado del muro que se observa en el aparcamiento para tomar el sendero que se ve perfectamente directamente hasta la cima. Una vez en la cumbre se deberá volver por el mismo camino ascendido.