Fotografía naturalista II

En esta ocasión nos planteamos si la fotografía naturalista y el senderismo son realmente compatibles el uno con el otro

`En ruta´
Por Felipe Colorado Lobo

No nos engañemos. Si pretendemos realizar una ruta con un grupo de amigos, o son todos aficionados a la fotografía, o no vamos a poder hacer paradas de veinte minutos para disparar a una mariposita. Los profesionales que revelan sus técnicas, como Javier Millas, nos pueden ayudar para abordar este arte desde una perspectiva aficionada. Ellos planifican sus rutas, pasan mucho tiempo en un mismo sitio y utilizan posiciones de disparo y camuflaje propias de las fuerzas especiales. 

De lo grande a lo pequeño

Tras practicar una temporada con grandes animales en lugares accesibles habremos probado sin duda las tres posturas básicas de disparo: a pie, rodilla en tierra y los más esforzados, tumbados. Eso de enfocar a través de la pantalla, con la espalda arqueada y las piernas `Elvis´ constituye pecado mortal en macro.

Nuestra bonita ropa de montaña de vivos colores no es la más adecuada para acercarnos a la fauna, ni tampoco caminar en animada y ruidosa charla. Por supuesto el kilometraje será algo secundario, siendo el camino el enlace entre distintos puntos donde encontrar modelos fotogénicos.

Nuestra ropa de montaña de vivos colores no es la más adecuada para acercarnos a la fauna

Técnicas de francotirador, como el control de la respiración durante apuntado y disparo, uso de los codos pegados al cuerpo y las rodillas como punto de apoyo, nuestra posición en sombras y de cara al viento, nos transformará en lo que deseamos convertirnos: auténticos cazadores de imágenes.

Recortes y post procesado

En los tiempos en que las cámaras aficionadas no superaban los 4 Mp, resultaba complicado recortar una imagen para aumentar un detalle. Hoy en día, con las elevadas resoluciones de los sensores, resulta factible recortar con aceptable calidad. En los laboratorios químicos de fotografía en blanco y negro se podían ejecutar infinidad de técnicas: máscaras, tapados, virados, solarizados…; efectos que podemos realizar de forma similar en el laboratorio digital.

Lunas refrigeradas

Una de las citadas técnicas consistía en impresionar un carrete solo con lunas, guardarlo en el frigorífico (lugar idóneo de almacenaje de carretes químicos) y utilizarlo posteriormente en fotografía nocturna, respetando el hueco ocupado por la luna. Esta técnica fue aplicada en la imagen del gamo. Probé con las lunas de un programa de retoque, pero no me convencían, eran demasiado definidas. Al final opté por una imagen de mi archivo que me pareció más adecuada. Como en todo, el límite en este campo es la propia imaginación.

Como en todo, el límite en este campo es la propia imaginación

La diversión comienza sobre el mapa, seleccionando los escenarios, continúa en el terreno y prosigue en casa, mejorando niveles y utilizando todos los recursos de los excelentes programas de procesado fotográfico. A fin de cuentas la fotografía es un arte más y un artista nunca acaba su obra, la abandona.

Nuestro objetivo nos aguarda

A través de nuestro periplo, buscando las miradas de los animales, habremos aprendido muchas cosas acerca de ellos y de nosotros mismos, pues una foto es una representación mental del autor en formato rectangular. Es el momento de afrontar el gran reto, el de captar en todo su esplendor la belleza de algún ave y, sobre todo, la belleza alienígena del rostro de los insectos, viviendo momentos tan intensos como la depredación de los arácnidos o la parada nupcial de los odonatos.

(Las imágenes fueron captadas en: Centro de Naturaleza Cañada Real, Monte de El Pardo, P.N. Braulio Carrillo, Costa Rica).

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