Las lluvias se han reducido de forma preocupante en toda la Sierra de Guadarrama en los últimos 55 años. En concreto, en Navacerrada, la caída ha sido del 8,8%; en Torrelodones, del 23,6%
P. Esteban/. A menudo se piensa que el cambio climático es un fenómeno cuyas consecuencias veremos a largo plazo, cuya afectación no es inminente. Craso error. Según un estudio de la asociación Globalízate sobre la evolución de las precipitaciones, nuestra región está atravesando el periodo más seco en los últimos 55 años.
Se trata de datos alarmantes y que deberían atraer la atención de las autoridades públicas antes de que sea demasiado tarde. Según los observatorios distribuidos por la región, la reducción de la precipitación media anual alcanza el 23,6% en la zona de Torrelodones, el 8,8% en el área de Navacerrada y el 20,6% en Manzanares El Real.
La contaminación, posible causa
Según el estudio, los meses de enero, febrero, marzo, junio y septiembre han sufrido descensos en la precipitación media mensual superiores al 30%, lo que supone una auténtica barbaridad para el ecosistema de la sierra. Hay indicios de que la contaminación atmosférica generada en Madrid capital, cinturones industriales y el tráfico aéreo en el aeropuerto de Barajas, podría estar inhibiendo la precipitación.
Sería conveniente, cuando no preceptivo, que los poderes públicos se pusieran manos a la obra y se enfrentaran de una vez por todas al cambio climático porque no es cosa del mañana. Ya está aquí.
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